Uno de los restaurantes quizás más completos de la provincia de Valencia es el Racó, en Meliana. Sus mejores bazas son: un salón acogedor, un servicio impecable, una gastronomía a caballo entre la tradición y la modernidad, aderezada con un extensísima carta de arroces y un precio acorde con la comanda. No se puede pedir más. En el Racó la apuesta siempre es segura y saldrá satisfecho plenamente.
El restaurante es uno de esos sitios en los que vale la pena recorrer los escasos 10 kilómetros que lo separan de Valencia para disfrutar de una gastronomía singular en donde predominan unos entrantes de temporada como el milhojas de foie caramelizado con manzana y setas, el tartar de salmón y aguacate, la ensalada de burrata con rúculay o la de tomate con sardina ahumada y encurtidos. Otros entrantes como el pulpo gratinado en all i olli, sepia con espuma de salsa mery o el ceviche de corvina con maíz y pico de gallo y unos arroces conocidos que se ofertan con otros un tanto peculiares como: el arroz de pato con setas blancas y alcachofas, el arroz de all i pebre con lubina y gamba rayada, el de bogavante con almejas o el de fesol i naps.
Tiene un amplio abanico de carnes , destacando su solomillo de buey, chuletitas de lechal o el rabo de toro. En cuanto a pescados, los hay para todos los gustos, pasando por su bacalao gratinado con muselina de ajo, la lubina a la espalda con cremoso de coliflor o su rodaballo con crema de espinacas y piñones.
El Racó respira glamour, elegancia, seguridad de que lo que te estás comiendo esta en las más óptimas condiciones. Su cocina sorprende, agrada y enamora. Es sin duda un templo de la buena comida. Posee además varias distinciones y reconocimientos gastronómicos como el primer premio en el Concurso de all i pebre de la Isla del Palmar o el primer premio de Putxero de la Comunidad Valenciana, obtenido en l’Alcúdia.
Recuerde apuntar este restaurante en su agenda. Es apostar a un caballo ganador.