El Vegamar Oro de Alejandría y el Huella de Syrah, ambos de 2019, repiten un año más entre los estacados de este concurso que selecciona y premia los vinos elaborados por mujeres
En Vegamar la enóloga es Maripaz Quílez, y el resto de puestos de responsabilidad están ocupados por mujeres desde la enología al marketing pasando por la exportación y la administración
El Esencia de Vegamar suma 7 premios este año… y sigue: ahora una Plata en Vindouro
El corazón de los vinos del Alto Turia de la DOP Valencia sigue siendo femenino plural. Al menos así se desprende los puestos clave de Bodegas Vegamar, todos ocupados por un equipo de mujeres que acaban de recibir dos nuevos premios por su labor en el certamen Vino y Mujer.
Maripaz Quílez es la enóloga de la firma, pero el resto de los cargos de responsabilidad también tienen alma femenina. Ana Coll se encarga del marketing, Montse de la administración, Vero es la bodeguera y en exportación están Ingrid y Mari Ángeles.
Bodegas con este tipo de perfil, cada vez más numerosas, son las que se suman una iniciativa singular cada año de premiar al mejor vino elaborado por mujeres o donde las mujeres han tenido una participación preeminente, con el objetivo de eliminar prejuicios.
El jurado también es femenino y este año han pasado por la cata final más de un centenar de vinos, de los cuales dos han sido para Vegamar.
Un Premio Rubí para el Vegamar Dulce, Oro de Alejandría 2019, y un Premio Esmeralda para el Huella de Syrah, ambos de la cosecha de 2019 y, curiosamente, ambos también reconocidos en la edición anterior, de modo que se aprecia cierta debilidad por estas dos elaboraciones de la finca de Calles.
Suma y sigue del Esencia de Vegamar, ya van 7 premios
El Esencia de Vegamar 2017 acaba de sumar un nuevo reconocimiento, una Medalla de Plata en Vinduero, el certamen que capitanean las regiones del Duero de España y Portugal y que precisamente donde más competencia hay es en la categoría de vinos tintos envejecidos en barrica.
El Esencia de Vegamar suma así el séptimo galardón del año en certámenes nacionales e internacionales. Es un vino elaborado con garnacha como variedad mayoritaria, pero con el apoyo de la internacional syrah, una pareja ganadora en el mercado exportador que gusta del equilibrio entre referencia de uvas muy conocidas mundialmente y con la distinción de las variedades autóctonas, como es la garnacha del Alto Turia.